El 6 de octubre, Kazajstán celebró un referéndum sobre la construcción de una central nuclear. En la votación participaron 63,36 ciudadanos de Kazajstán, de los cuales el 71,12% expresó su apoyo a la construcción de una central nuclear.
El presidente Kassym-Jomart Tokayev, hablando ante los periodistas en el colegio electoral, afirmó que si el pueblo kazajo apoya la construcción de una central nuclear, el proyecto debería confiarse a un consorcio internacional de empresas con las tecnologías más avanzadas.
El lugar propuesto para la construcción de la central nuclear es el pueblo de Ulken, a orillas del lago Baljash. El proyecto tiene muchos opositores, guiados no sólo por motivos medioambientales sino también políticos. En su opinión, si la estación es construida por Rosatom, aumentará la dependencia de Kazajstán de Rusia.