La edición estadounidense del Wall Street Journal escribe que en el suburbio sur de Beirut, en la zona de Haret Hreik, donde, según la inteligencia israelí, se encontraba el cuartel general principal de Hezbollah, se está produciendo una destrucción significativa. La publicación afirma que el principal objetivo del ataque era el secretario general de Hezbollah, Hassan Nasrallah.
No está claro si Nasrallah sobrevivió.
Ali al-Haraka, funcionario municipal de Beirut, dijo que varios edificios fueron destruidos en el área de Haret Hreik. Según sus estimaciones, las víctimas son muchas y se está aclarando su número.
El WSJ, citando fuentes informadas, informa que en la sede se encontraban líderes de Hezbollah y altos representantes del Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán. Algunas fuentes dijeron que Hezbollah había perdido contacto con varios altos funcionarios después de la explosión, según la publicación.
La muerte de Nasrallah sería un duro golpe no sólo para el grupo que lidera, sino también para su principal patrocinador, Irán, y la red más amplia de milicias afiliadas que Teherán ha construido en todo el Medio Oriente para contrarrestar a Israel. También sería el más fuerte hasta la fecha. una señal de que Hezbollah ha sido profundamente penetrado por la inteligencia israelí”, escribe el WSJ.
Las FDI hablaron en árabe con los residentes de Dahiya, al sur de Beirut, que viven en tres áreas cercanas a la infraestructura de Hezbollah, instándolos a evacuar urgentemente. Al parecer, la Fuerza Aérea de las FDI se está preparando para lanzar nuevos ataques contra objetivos de Hezbollah en Beirut. Estos objetos se encuentran a una distancia considerable de la sede de Hezbollah, que fue atacada anteriormente.