La misión de mantenimiento de la paz de la FPNUL informó en su canal Telegram que en la mañana del 16 de octubre, un tanque israelí disparó contra la torre de observación de los Cascos Azules cerca de la aldea de Kafr Qila. El disparo destruyó dos cámaras de vídeo y dañó el propio puesto de observación.
La FPNUL cree que el ataque fue deliberado. “Recordamos a las FDI sus obligaciones de garantizar la seguridad del personal y los bienes de la ONU”, decía el comunicado.
Esta no es la primera vez que las fuerzas de la FPNUL en el Líbano son atacadas. Después de uno de los incidentes, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, dijo que “la única forma de garantizar la seguridad del contingente de la FPNUL es escuchar la solicitud de Israel y retirarse temporalmente de la zona de peligro”. Netanyahu enfatizó que Israel no está luchando ni contra la FPNUL ni contra los ciudadanos libaneses. “Estamos en guerra con el bastión iraní, Hezbollah, que está utilizando territorio libanés para atacar a Israel. Hezbollah atacó a Israel sin ninguna provocación de nuestra parte hace un año, el 8 de octubre, el día después de la masacre de Hamás, y con “Hezbollah ha Desde entonces, ha estado utilizando objetivos y posiciones de la FPNUL como cobertura para ataques contra ciudades y pueblos israelíes, lanzando más de 10.000 cohetes y proyectiles contra Israel. Estos ataques se han cobrado la vida de muchos israelíes, incluso ayer”, afirmó el primer ministro israelí, subrayando que Israel tiene todo el derecho a defenderse contra Hezbolá y seguirá haciéndolo.
El Secretario General Adjunto de Operaciones de Paz de la ONU, Jean-Pierre Lacroix, dijo a los periodistas el 15 de octubre que las tropas de la FPNUL, a pesar de los llamamientos israelíes para un redespliegue, permanecerán en sus posiciones en el sur del Líbano.
“Para cumplir el mandato del Consejo de Seguridad y proporcionar asistencia a los civiles, es necesario que los cascos azules permanezcan en su lugar”, dijo el funcionario internacional a los periodistas.