El Tribunal Superior de Justicia ha rechazado una apelación contra las fuerzas de seguridad que retienen el cuerpo del terrorista Walid Dhaki, quien participó en el secuestro y asesinato del soldado de las FDI Moshe Tamam en 1984 y murió en una prisión israelí en abril de este año.
Los familiares de Moshe Tamam acogieron con satisfacción esta decisión: el abogado Yehuda Fua, presidente del movimiento de derechos humanos Btsalmo, que representaba los intereses de la familia del soldado fallecido, subrayó que es deber del Estado de Israel preservar el cadáver del terrorista hasta que todos los secuestrados son devueltos.
Walid Daqa era titular de un pasaporte israelí y vivía en la aldea de Baqa al-Gharbiya antes de su arresto. En 1986, fue condenado a cadena perpetua por su participación en el asesinato del soldado israelí Moshe Tamam. Debido a su diagnóstico de cáncer, Daka solicitó la libertad anticipada varias veces, pero cada vez fue rechazada por no cumplir con las condiciones para la liberación anticipada.
Se suponía que sería liberado en 2023, pero le condenaron otros dos años por contrabandear teléfonos móviles a la prisión de Ktsiot. En mayo de 2023, presentó otra solicitud de libertad anticipada. Y aunque el médico de la prisión escribió en su informe que a Daka sólo le quedaban unos meses de vida, su petición fue nuevamente rechazada.
El terrorista murió de cáncer en el hospital Assaf HaRofe el 7 de abril a la edad de 62 años.
La agencia de noticias palestina Shehab y el Centro de Información Palestino lo consideran una de las figuras más destacadas de la resistencia palestina, recuerdan que mientras estaba en prisión escribió y publicó varios libros, entre ellos Diarios de la resistencia de Jenin, “Tiempo paralelo” y un libro para Los jóvenes “La historia secreta de la espada”. Los informes indicaron que la causa de su muerte fue la “negligencia israelí” y los malos tratos.