La escalada del conflicto árabe-israelí se ha convertido en uno de los temas importantes de confrontación política en Canadá, donde la oposición ha estado intentando disolver el gobierno y celebrar elecciones parlamentarias anticipadas en los últimos meses.
El líder de la oposición canadiense y jefe del Partido Conservador canadiense, Pierre Poilievre, afirmó que Israel “ayudará al mundo entero si ataca las instalaciones nucleares iraníes”.
Poilievre arremetió contra la ministra de Asuntos Exteriores canadiense, Mélanie Joly, diciendo que había cedido a la presión de los partidarios de Hamás en el Partido Liberal en lugar de hacer su trabajo. Según él, centró sus esfuerzos en intentar sustituir a Justin Trudeau y convertirse en primera ministra en lugar de representar los intereses de Canadá como jefa del Ministerio de Asuntos Exteriores.
Joly calificó sus declaraciones de “totalmente inaceptables” y acusó al líder de la oposición de “politizar el aniversario del ataque de Hamás del 7 de octubre”. “Él pide división, no unidad”, dijo el ministro de Asuntos Exteriores, añadiendo que “Pierre Poilievre no está preparado para ser primer ministro”.
El Ministro de Defensa canadiense, William Blair, dijo que Canadá apoya el derecho de Israel a la autodefensa, pero está categóricamente en contra de un ataque a las instalaciones nucleares iraníes.