El miércoles 2 de octubre se celebró una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para discutir los últimos acontecimientos en Oriente Medio. La solicitud de una discusión de emergencia fue presentada por el representante permanente de Israel, Danny Danon, después de que Irán lanzara un ataque con misiles contra Israel.
Al inaugurar la reunión, el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, afirmó que es necesario poner fin a la nueva ronda de violencia, que se basa en el principio de “ojo por ojo”. Advirtió que el tiempo para esto se acaba.
El representante permanente de Israel ante la ONU, Danny Danon, dijo que “se acabó el tiempo de las conversaciones vacías”. Calificó de absurdo el llamamiento a ambas partes para que “detengan la escalada”, ya que equipara a quienes “causan destrucción” con “aquellos que se defienden”. “Israel se defenderá. Y permítanme asegurarles que las consecuencias para Irán serán mucho más graves de lo que podrían haber imaginado”, dijo Danon.
El representante permanente iraní, Amir Saeed Iravani, dijo que el ataque con misiles contra Israel el 1 de octubre tenía como objetivo “restablecer el equilibrio y la disuasión”. También dijo que se podría evitar una mayor escalada de tensiones si Israel dejara de luchar en Gaza y el Líbano.
La embajadora de Estados Unidos ante la ONU, Linda Thomas-Greenfield, dijo que el apoyo de su país a Israel era de naturaleza defensiva. “Permítanme ser clara: el régimen iraní será responsable de sus acciones. Y advertimos a Irán y sus representantes contra cualquier medida dirigida contra Estados Unidos o Israel”, dijo.
Reuters informó que Estados Unidos e Israel pidieron nuevas sanciones contra Irán.