En Toronto, la mañana de Yom Kipur, agresores desconocidos dispararon contra la escuela judía para niñas Beis Haya Mushka. La policía recibió un informe de una ventana rota alrededor de las 4 am. Pronto quedó claro que se produjeron disparos contra el edificio. Este es el segundo incidente relacionado con esta institución educativa: en mayo de este año la escuela también fue bombardeada.

El inspector Paul Krawczyk dijo que se realizaron disparos en la escuela, causando daños no sólo a una ventana sino también a otras partes del edificio. En las últimas semanas, la policía ha intensificado las patrullas en las zonas judías de la ciudad y, tras el último incidente, también aumentará el control en la zona de la escuela, que lleva el nombre de la esposa del Lubavitcher Rebe Chaya Mushka Schneerson.

El primer ministro canadiense, Justin Trudeau, y otros políticos expresaron su preocupación por lo sucedido. Trudeau calificó el antisemitismo como una forma de odio repugnante y peligrosa, y enfatizó que no tiene lugar en la sociedad. La alcaldesa de Toronto, Olivia Chau, calificó el incidente de horrible y dijo que la comunidad judía tiene todo el derecho a sentirse segura. El concejal de la ciudad de Toronto, Brad Bradford, también condenó el acto y destacó que debido a la falta de medidas adecuadas, el nivel de antisemitismo en la ciudad ha aumentado.

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